Esta semana ha sido muy estable, en el sentido en que he cumplido mi meta semanal, pero sin bajada de gramos extras. He bajado de 77.5 kg, que fue lo que pesé justo el viernes 26 de febrero, a 76.5 kg (tanto este viernes 4, como este lunes 7 de marzo, ya que el fin de semana hice un par de comidas fuera de dieta).
Por el momento, sin más novedades que la de ser constante con la alimentación saludable y el ejercicio (esta semana mi comida consistió bastante en lentejas con verduras); les comparto un desayuno que pude disfrutar estos días, y que a pesar de no ser del todo light, aporta bastante energía y sin pasarnos en las calorías y grasas.
Este rico desayuno consta de una rebanada de pan integral tostado embarrado de tomate triturado (puede ser de lata o simplemente triturar un poco de tomate en la licuadora o batidora), aderezado con aceite de oliva virgen extra, a esto le añadimos dos rebanadas de jamón serrano, y para rematar, un huevo frito de codorniz. Lo acompañamos con café con leche de almendras y un vasito de jugo de naranja.
A pesar de que el desayuno es bastante normal y no muy light, el truco es bajar las cantidades, y comernos sólo una rebanada de pan (en lugar de dos). El desayuno, al ser la primera comida del día, nos da la oportunidad de consentirnos un poco, mientras que en las cenas debemos cuidarnos más.
Sin más por el momento, les deseo una bonita semana. ¡Mucho ánimo, y a alcanzar nuestras metas! :)
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